miércoles, mayo 25, 2005

Veronika decide morir-Paulo Coelho

"Veronika es una joven completamente normal. Es guapa, no le faltan pretendientes y tiene un buen trabajo. Su vida transcurre sin mayores sobresaltos, sin grandes alegrías ni grandes tristezas. Pero no es feliz. Por eso, una mañana de noviembre, Veronika decide acabar con su vida. Sueños y fantasías. Deseo y muerte. Locura y pasión. En su camino hacia la muerte, Veronika experimenta placeres nuevos y halla un nuevo sentido a la vida, un sentido que le había permanecido oculto hasta ahora, cuando tal vez ya sea demasiado tarde para echarse atrás. Veronika decide morir plantea que cada segundo de nuestra existencia optamos entre la alternativa de seguir adelante o de abandonar".

Hay gente a la que no le gusta el misticismo, Paulo Coelho, en mi opinión, lo emplea bastante, pero si quereis leer un libro de Paulo Coelho que no se pase de misticista, os recomiendo el que hasta ahora es mi libro favorito.
Espero que os guste, si es que intentáis leerlo.

2 comentarios:

Borisgrushenko dijo...

Soy partidario de que despues de los 18 cada cual se envenene como quiera, pero Paulo Coelho... no me jodas. Es un listo que coge filosofía New Age, galletas de la fortuna chinas, libros de autoayuda,pastel de chocolate y novelas rosas, las mete en una batidora, las mezcla y te lo sirve todo trituradito, como en un menu Whopper... (en un producto solo apto para depresivos crónicos, menopausicas precoces y sindromaniacos premenstruales)
Si quieres misticismo prueba con los clasicos hinduistas y budistas (a mi me mola Zen Flesh, Zen Bones), si quieres autoayuda busca cualquier cosa menos un libro de autoayuda (L'Alpe d'Huez está muy bien, aunque no te guste el ciclismo) y si quieres pasarte por el forro todos los convencionalismos morales prueba con El Hombre de los Dados (mira, ya se que voy a hacer esta noche...)
Lo siento nena, es que cuando me mentan la bicha se me calienta la lengua. Y se me tensa el brazo.

kapela dijo...

Lo entiendo, pero yo probe con mas de un libro y el segundo me gustó, no sé, debe ser masoquismo... o algo.